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Arte Fernando Botero |
Las emociones afectan y se manifiestan directamente en el cuerpo físico si no son resultas. Las emociones negativas causan sobrepeso. Cuando descubres cómo identificar las emociones negativas y aprendes a tratarlas, no sólo te sientes mejor anímicamente, también puedes mejorar tu relación con los alimentos y cuidar tu peso, La mayoría conocemos a “alguien” que a diario evita golosinas y postres, come ensaladas a todas horas, rechaza abundantes porciones de pasta o corre por las mañanas los fines de semana y, a pesar de los esfuerzos, sigue preguntándose cómo mantener el peso bajo control.
Se entristece o desanima tanto que a menudo cae en la tentación de iniciar dietas “milagro” que afectan su salud o, todo lo contrario, protagoniza atracones de comida por estrés, ansiedad, ira o depresión que interpreta como “autocastigo” por su derrota contra la báscula.
Esta situación es más frecuente de lo que imaginas y detrás de ella generalmente descubrimos que las emociones negativas causan sobrepeso y obesidad, es decir, la persona recurre a la comida para canalizarlas sin saber que existen estrategias que pueden ayudarla a enfrentarlas sin ganar kilos de sobra a cambio.
Expertos en el estudio del comportamiento humano consideran que las causas de obesidad y sobrepeso podrían estar directamente relacionadas con dificultades afectivas. La mayoría de psicólogos considera que estas condiciones reflejan una canalización de emociones negativas a través de la comida y con ellas el individuo genera una protección inconsciente del mundo a través de la grasa que rodea su cuerpo.
Tienes que identificar si realmente tienes hambre o solo comes para evadir emociones...
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