Quizás ya no hay futuro...

Quizás ya no hay futuro

Amado Maestro, la guerra atómica está en el horizonte, la enfermedad mortal el SIDA se está extendiendo rápidamente, y los científicos dicen que la tierra cambiará su eje al final de este siglo. Pero ¿por qué los sacerdotes, políticos y gobiernos no son conscientes de estos hechos? ¿Y por qué no están interesados en hacer que el público tome consciencia? Por favor, podrías comentar al respecto. 

Es una de las preguntas más importantes que se pueden hacer, pero tendrás que comprender algunas implicaciones más profundas, de las que puede no ser consciente.

Los políticos y los sacerdotes tienen un interés personal en mantener a la gente del mundo inconsciente del futuro. La razón es muy simple: si las personas son conscientes del futuro y de la oscuridad que se avecina, la muerte que se acerca cada vez más habrá una tremenda agitación en la conciencia del hombre en todo el mundo. Y los políticos y los sacerdotes, que han dominado a la humanidad durante milenios, saben perfectamente que no pueden resolver ningún problema que la humanidad enfrentará en el futuro. Son absolutamente impotentes. Los problemas son demasiado grandes y demasiado pequeños. La única forma en que pueden salvar sus rostros es no dejar que las personas se den cuenta de lo que sucederá mañana.

Tengo que dejar en claro también que la política atrae solo a las mentes más mediocres del mundo. No atrae a Albert Einsteins, Bertrand Russells, Jean-Paul Sartres, Rabindranath Tagores... No, atrae a cierto tipo de personas. Los psicólogos son conscientes del hecho de que las personas que sufren algún complejo de inferioridad son las personas que se sienten atraídas por la política, porque la política puede darles poder. Y a través del poder pueden convencerse a sí mismos y a otros de que no son inferiores, que no son mediocres.

Pero solo alcanzar el poder no hace ninguna diferencia en su inteligencia. Entonces, todo el mundo está gobernado por personas mediocres cuando tenemos una gran cantidad de personas inteligentes: científicos, artistas, músicos, poetas, bailarines, pintores, todo tipo de personas sensibles y creativas, la verdadera crema de la humanidad, pero no están en el poder. Pueden cambiar todo el tejido de la historia humana, pueden cambiar la oscuridad del futuro en una hermosa mañana, un amanecer. Pero la desgracia es que el poder está en manos de las personas equivocadas, y las personas de inteligencia

carecen de poder.

Te contaré una pequeña historia para que quede claro...

Un gran místico escuchó que uno de sus amigos, un amigo de la infancia, habían jugado juntos, estudiado juntos, se había convertido en el primer ministro del país.

Solo para felicitarlo, el místico bajó de las montañas. Fue un largo viaje, agotador. Cuando llegó al palacio del primer ministro, el primer ministro se estaba preparando para ir a algún lado.

Reconoció al místico, pero dijo: 

-"Lo siento, tengo algunas citas. Tengo que ir a tres lugares, y me encantaría que pudieras venir conmigo. En el camino podemos hablar y recordar los viejos tiempos dorados.

El místico dijo: 

-"Me encantaría ir contigo, pero puedes ver que mis harapos están llenos de polvo".

No sería correcto sentarse a tu lado en un carro dorado.

El primer ministro dijo:

- "No te preocupes. El rey me ha prestado un abrigo muy costoso. Nunca lo he usado;

Lo he estado guardando para alguna ocasión especial. Te daré el abrigo. Solo te lo pones; cubrirá tu ropa, el polvo y todo". Le dieron el abrigo. 

Llegaron a la primera casa. Entraron en la casa. El primer ministro presentó a su amigo: 

- "Es un gran místico. Él vive en las montañas. Todo lo que tiene es suyo, excepto el abrigo, eso es mío. El místico no podía creerlo: "¿Qué clase de estupidez es esta?"

Incluso la familia se sorprendió al insultar al místico de esa manera.

Fuera de la casa, el místico dijo: 

- "Es mejor que no te acompañe. Me has insultado. ¿Cuál era la necesidad de decir que es tu abrigo? No estaban preguntando ".

Él dijo: 

- "Lo siento, perdóname. Y si no vienes conmigo a la próxima cita, pensaré que no me has perdonado ". El místico era un hombre de corazón sencillo. Él dijo: "Entonces está bien, ya voy".

Al entrar en la segunda casa, el primer ministro lo presentó: 

- "Es un gran místico que vive en las montañas". ¡Todo es suyo, incluso el abrigo es suyo! El místico no podía creer que este hombre tuviera inteligencia alguna. Afuera simplemente se negó: "No puedo ir a tu tercera cita. Esto es demasiado."

Pero el político dijo: 

- "¡He dicho que el abrigo es tuyo!"

El místico dijo: 

- "Es increíble lo poco inteligente que puede ser un hombre". Tu afirmación, énfasis, de que el abrigo es mío, crea sospechas: hay algo que está ocultando. ¿Cuál es la necesidad de mencionar el abrigo? No veo el punto de que en cualquier introducción se necesiten abrigos".

Y el político dijo: 

- "Perdóname, pero si no vienes a la tercera cita, nunca olvidaré que te he hecho daño. Por favor, solo hay una cita más, y no diré que el abrigo es tuyo o que es mío. No te preocupes por eso". 

El simple místico, inocente, aceptó ir con él. En la tercera casa presentó al místico de la misma manera: "Es un gran místico de las montañas". Toda la ropa es suya, pero en lo que respecta al abrigo, ¡es mejor no decir nada! 

El político no es la parte más inteligente de la humanidad. De lo contrario, no habría habido cinco mil guerras en tres mil años. El político ha destruido, pero no ha creado nada. Es el político quien está creando las armas atómicas, los misiles nucleares. ¿Con qué rostro puede hacer que la gente del mundo sea consciente de que el futuro es oscuro, triste? Quizás ya no hay futuro, quizás estamos sentados en un volcán que puede entrar en erupción en cualquier momento.

Ya tenemos tantas armas nucleares que podemos destruir setecientos planetas del tamaño de nuestra tierra. En otras palabras, podemos matar a cada hombre setecientas veces. ¿Puedes pensar en la estupidez de esto? Un pobre hombre simplemente muere una vez. No hay necesidad de matarlo setecientas veces. ¿Para qué se está haciendo todo este arreglo nuclear? Hay una cierta locura detrás de esto. La locura es que el político solo puede vivir si hay guerra.

En su autobiografía, Adolf Hitler ha hecho muchas declaraciones significativas. Una de las declaraciones es que si un político quiere ser un gran héroe, una gran figura histórica, entonces la única forma es crear una gran guerra. Sin guerra no tienes héroes.

Solo piense en todos sus héroes, han sido creados por la guerra: Alejandro Magno, Napoleón Bonaparte, Nadirshah, Tamerlán, Genghis Khan, Joseph Stalin, Benito Mussolini, Adolf Hitler, Winston Churchill ... Y qué tienen estas personas, excepto que vivieron en el momento de una gran guerra. La guerra los lleva al pináculo de su gloria. Y toda tu historia está llena de estos idiotas. Si tenemos algún sentido, deberíamos dejar de estudiar este tipo de historia por completo en las escuelas y universidades.

¿No puedes estudiar gente hermosa, gente creativa? Hemos producido grandes músicos. Hemos producido grandes científicos. Hemos producido grandes poetas. Hemos producido grandes pintores. Nuestra historia debería recordarlos. Nuestra historia debe recordarnos que son nuestros verdaderos antepasados, no Genghis Khan, ni Tamerlán, ni Nadirshah. Estos son accidentes, y ni siquiera deberían tener un lugar en las notas al pie de los libros de historia. Deben ser simplemente ignorados. Eran locos y no hay necesidad de seguir estudiándolos y creando el mismo tipo de deseo en la nueva

generación. Los sacerdotes también están en una profunda conspiración con los políticos. Es una conspiración de miles de años: el sacerdote protege al político; El político protege al sacerdote. Tiene que ser entendido. Por ejemplo, en Oriente, el sacerdote le ha estado diciendo a la gente: "Eres pobre

porque en tu vida pasada has estado haciendo actos malvados". Ha convencido a la gente. Cuando sigues diciendo lo mismo una y otra vez durante miles de años, deja una impresión profunda en la mente de las personas. ¡No solo impresiona a la gente, sino que incluso impresiona al sacerdote mismo! Es un fenómeno psicológico muy extraño.

Me recuerda una anécdota ...

Un periodista murió. Llegó directamente a la puerta del paraíso y llamó a la puerta. Se abrió una pequeña ventana y el portero dijo: 

- "Perdóname, tenemos una cierta cuota para periodistas que está completa. Solo necesitamos una docena de periodistas en el paraíso. De hecho, incluso son inútiles, porque aquí no pasa nada, no hay noticias”. Solo recuerda la definición de noticias: cuando un perro muerde a un hombre, no es noticia; cuando un hombre muerde a un perro, es noticia. Y, naturalmente, en el paraíso no hay noticias. "Incluso los doce periodistas se aburren, así que, por favor, ve a la otra puerta, en frente". Pero los

periodistas son personas tercas, no puedes deshacerte de ellos tan fácilmente ...

Él dijo: - "Solo escucha esta cosa. Iré a la otra puerta después de veinticuatro horas, pero no ahora.

El portero dijo: - "¿Qué vas a hacer durante veinticuatro horas, de pie aquí?"

Él dijo: - "No voy a quedarme aquí, me dejas entrar. Si puedo convencer a uno de los doce periodistas de que se vayan al infierno, entonces puedes darme su lugar".

La cuota permanecerá completa ". Incluso el portero pensó que era sensato. Él dijo:

"Está bien, entra. Pruébalo".

Después de veinticuatro horas logró decirles a todos, periodistas, no periodistas: 

"En el infierno habrá un nuevo periódico publicado que será el más grande y el más importante". Necesitan editores, subeditores, reporteros, todo tipo de periodistas, ¡con buenos salarios! Después de veinticuatro horas regresó a la puerta. El portero dijo: "No puedes salir".

Él dijo: - "¿Qué quieres decir?"

Él dijo: - "Los doce han escapado. Los convenciste y estaban creando tanto escándalo que finalmente los dejé ir. Ahora no puedes irte, al menos deberíamos tener un periodista.

Pero el periodista dijo: - "No puedo quedarme".

El portero dijo: - "Tú creaste la mentira. No hay periódico. No hay grandes salarios".

Él dijo: - "Sí, yo creé la mentira, pero si doce personas lo han creído, ¡debe haber algo!" No quiero estar aquí Abres la puerta, de lo contrario me voy a quejar. No pertenezco aquí, se supone que no debo estar aquí ". Al ver que era cierto, el portero le permitió ir sin permiso de ninguna autoridad superior. 

¿Qué le había pasado al periodista? Había inventado una mentira y logró convencer a doce personas. Cada vez que convences a alguien, también estás siendo convencido simultáneamente. Durante siglos en el Este, el sacerdocio ha convencido a la gente de que son tus actos malvados del pasado los que te han hecho pobre. Todo lo que necesita hacer es mantenerse satisfecho con su pobreza, con su enfermedad, con su muerte. Esta es una prueba de tu confianza. Y si puedes pasar esta prueba de fuego, en la próxima vida, después de la muerte, serás recompensado enormemente.

Esta es la razón por la cual en el Este la ciencia no ha progresado, la tecnología no ha nacido. Si la gente pobre está contenta, si la gente pobre no quiere ser otra cosa que pobre, entonces, ¿cuál es la necesidad de la tecnología, de la ciencia, del progreso, de la evolución, de crear más riqueza, de crear una sociedad mejor, de distribuir la riqueza de una manera más humana? No hay necesidad. 

El político está contento porque no hay posibilidad de revolución. El sacerdote protege al político contra la revolución. Y el político, por su parte, sigue alabando al sacerdote, que es un gran santo. Toca los pies del sacerdote, particularmente en el momento de las elecciones. El da respeto; él va a todo tipo de santos, shankaracharyas, imanes, papas ... Pronto el papa vendrá a la India, y verás a todos los políticos corriendo a darle la bienvenida. Ahora, en la India, el cristianismo es la tercera religión más grande. Ahora el papa tiene que ser persuadido.

Los santos mahometanos, vivos o muertos, deben ser adorados. Los santos hindúes, ya sean santos o simplemente idiotas, tienen que ser elevados a la más alta espiritualidad. Esta es una conspiración para explotar a la gente. Los sacerdotes no pueden decir lo que sucederá en el futuro, por la sencilla razón de que el sacerdote vive del pasado. Vive del Shrimad Bhagavadgita, que sucedió hace cinco mil años. Vive por el Corán Sharif, vive por la Santa Biblia. Todo su mundo está en el pasado; Él es un adorador de los muertos. 

No tiene ojos para el futuro, y tampoco inteligencia. No creo que ningún hombre inteligente pueda ser sacerdote, porque el sacerdote miente continuamente y ningún hombre íntegro puede hacer eso.

El sacerdote miente en cada cuenta. Él no sabe nada de Dios. No ha experimentado, no se ha encontrado, pero sigue mintiéndole a la gente, pretendiendo ser un representante de Dios, un mediador entre tú y Dios. Él no te permite estar en contacto directo con la existencia. Él siempre quiere que escribas tus cartas de amor al cuidado del sacerdote. Sus oraciones solo pueden llegar a Dios a través del sacerdote. Extraño, ¿con qué autoridad...? Hace solo unos días, la cabeza de los cristianos, el papa, declaró que uno de los pecados más grandes es confesar directamente a Dios: la confesión debe ser al sacerdote. ¿Entiendes esta astuta estrategia?

El sacerdote católico siempre está ahí para escuchar tu confesión, y debes contarle todo sobre tus pecados, tu vida privada. Eso le da poder. ¿Lo entiendes? Él tiene un archivo sobre ti. No puedes abandonar el redil católico. Él puede exponerte. Él puede destruir tu respetabilidad. Él sabe que has tenido una aventura amorosa con la esposa de tu vecino... Puedes esconderte de todos, pero no del sacerdote, porque él es el único que puede manejar el perdón de Dios por tus pecados. Pero es extraño, ¿por qué no puedes confesar a Dios directamente? Esto es política; Esto no es religión. 

Me he encontrado con sacerdotes de todas las religiones, y nunca he visto a ninguno de ellos que tenga inteligencia. Si tuvieran alguna inteligencia, compondrían música, crearían algo de belleza, inventarían algo para mejorar la humanidad. Encontrarían alguna forma de destruir la pobreza en el mundo. Pero el sacerdote sigue haciendo todo lo contrario. Todos los sacerdotes de todas las religiones, sin excepción, están en contra del control de la natalidad, están en contra del aborto. Estaba hablando con un obispo y le dije que si hay abortos, él era responsable de ellos.  Él dijo: "¿Qué estás diciendo? Estamos en contra del aborto ". Le dije: "Sí, lo sé, pero también estás en contra del control de la natalidad. Si estuvieras a favor del control de la natalidad, no habría necesidad de abortar ". 

OSHO_LA CIENCIA DEL ALMA INTERIOR