La mente, los sentimientos, y el cuerpo físico, sobre todo si abusas del trabajo intelectual,
sufres sentimientos violentos o tienes el cuerpo en tensión,
son un "vaso" que retiene y limita el paso de las aguas de la vida.
Sólo rompiendo el vaso de la mente,
de los sentimientos y del cuerpo obtendrás la adecuada circulación de vida por tu ser.
Rompes este vaso cuando meditas, permaneces en silencio o te relajas.
Pero esto requiere tiempo, paciencia, sacrificio y ganas y,
si un día permites que se llene un poco ese vaso,
intenta al día siguiente vaciarlo el doble.
|
El temor a perder "esa acumulación de cosas" es lo que muchas veces limita... "El que mucho abarca; poco aprieta" dice el refrán popular; y otros dirán con sorna: "Pero mucho abarca..."
ResponderEliminarGracias querida compañera por enseñarme como vaciar y romper el vaso...