Cuando voy en un transporte público, o estoy en una fila esperando turno, o simplemente en un banco de una plaza, o en el supermercado y escucho las conversaciones de los demás, es increíble la competencia a ver quién tiene más desgracias, o sufrió más cirugías o toma más medicamentos, sea de ellos mismos o de algún familiar, es una competencia a ver quién sufre más, quién tiene más problemas... en realidad todos tenemos problemas, pero no son tales si tienen solución, y además no tenemos que andar compitiendo con los demás aludiendo que nuestros problemas son mayores que los otros.... Es curioso, pero cuando uno no cuenta calamidades de su vida los demás tratan de inventártelas. Cuando entendemos que todo proviene del ego ya no nos "preocupamos" y nos ocupamos.